El amor y el cráneo – VIÑETA ANTIGUA (nº 140)
Se sienta el amor en el cráneo
de la Humanidad,
y sobre tal solio el profano,
con risa procaz,
sopla alegremente redondas burbujas,
que en el aire suben,
como para juntarse a los mundos
al fondo del Éter.
[...]
El palimpsesto
“¿Qué es el cererbro humano sino un inmenso y natural palimpsesto? [...] Sobre vuestro cerebro han caído sucesivamente innumerables capas de ideas, de imágenes, de sentimientos, tan suavemente como la luz.
” [...] Sí, lector, innumerables son los poemas de gozo o de pena que se han ido sucesivamente grabando en el palimpsesto de vuestro cerebro, y como las hojas de las selvas vírgenes, como las indisolubles nieves del Himalaya, como la luz que cae sobre la luz, sus incesantes capas se han ido acumulando y, cada una, a su vez, se ha cubierto de olvido.
” [...] Pero las profundas tragedias de la infancia -brazos infantiles para siempre arrancados del cuello de sus madres, labios infantiles para siempre separados de los besos de sus hermanas- perviven ocultas bajo las demás leyendas del palimpsesto. La pasión y la enfermedad no cuentan con química suficientemente poderosa como para quemar esas inmortales huellas.”
” [...] Sí, lector, innumerables son los poemas de gozo o de pena que se han ido sucesivamente grabando en el palimpsesto de vuestro cerebro, y como las hojas de las selvas vírgenes, como las indisolubles nieves del Himalaya, como la luz que cae sobre la luz, sus incesantes capas se han ido acumulando y, cada una, a su vez, se ha cubierto de olvido.
” [...] Pero las profundas tragedias de la infancia -brazos infantiles para siempre arrancados del cuello de sus madres, labios infantiles para siempre separados de los besos de sus hermanas- perviven ocultas bajo las demás leyendas del palimpsesto. La pasión y la enfermedad no cuentan con química suficientemente poderosa como para quemar esas inmortales huellas.”
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